Se acaban de terminar las fiestas del Pilar, ahora si que ya, sin ningún genero de dudas, entramos en lo que comúnmente denominamos “el curso escolar”. En el resto de España este periodo lleva ya al menos un mes, pero en Zaragoza, tradicionalmente, el curso no empieza hasta que se acaba el Pilar. Es como si no resistiésemos a abandonar el largo verano, y consiguiésemos retenerlo por unas semanas más; cuando comienza el curso aun nos queda El Pilar, y es como si todo se empezase a medio gas.
Pero ahora ya no hay ninguna excusa, nada podemos argumentar…. Ahora ya estamos metidos en el otoño, en el curso escolar (vayamos a la escuela o no lo hagamos) y en lo que se ha dado en denominar “el cada día”. Esta es una denominación curiosa, que no quiere decir nada, y que sin embargo utilizamos todos.
Para mí, cuando empieza esa época del año, hay un hecho muy curioso, y es que las semanas se me pasan sin enterarme. Ahora que entramos en un periodo de actividad “normal” en el que se comienza a vivir y trabajar de manera más ordenada, parece que el tiempo corra más deprisa y sin enterarnos nos presentaremos en Diciembre y los preparativos de la Navidad.
Me resulta sorprendente la visión subjetiva que tenemos del tiempo. Hay tiempos que se nos pasan deprisa, o periodos de la misma duración que se nos hacen eternos… y creo que depende de los contenidos de esos tiempos, y de cómo nos resultan a nosotros, de si nos son pesados o no, agradables o no….
Así pues de nuevo al gimnasio, a entrenar a tus deportes favoritos, a las partidas con los amigos, y al trabajo, como cada invierno, de la manera habitual, porque por eso estamos ya en el “cada día”. Por cierto, a mi me gusta volver a mi vida ordenada, despues del esperado verano, de los ajetreos, del ir y venir, del sol, de las vacaciones.... a mi me encanta volver a comenzar un periodo de vida ordenada, y de que todo vuelva a su sitio.
JM
Pero ahora ya no hay ninguna excusa, nada podemos argumentar…. Ahora ya estamos metidos en el otoño, en el curso escolar (vayamos a la escuela o no lo hagamos) y en lo que se ha dado en denominar “el cada día”. Esta es una denominación curiosa, que no quiere decir nada, y que sin embargo utilizamos todos.
Para mí, cuando empieza esa época del año, hay un hecho muy curioso, y es que las semanas se me pasan sin enterarme. Ahora que entramos en un periodo de actividad “normal” en el que se comienza a vivir y trabajar de manera más ordenada, parece que el tiempo corra más deprisa y sin enterarnos nos presentaremos en Diciembre y los preparativos de la Navidad.
Me resulta sorprendente la visión subjetiva que tenemos del tiempo. Hay tiempos que se nos pasan deprisa, o periodos de la misma duración que se nos hacen eternos… y creo que depende de los contenidos de esos tiempos, y de cómo nos resultan a nosotros, de si nos son pesados o no, agradables o no….
Así pues de nuevo al gimnasio, a entrenar a tus deportes favoritos, a las partidas con los amigos, y al trabajo, como cada invierno, de la manera habitual, porque por eso estamos ya en el “cada día”. Por cierto, a mi me gusta volver a mi vida ordenada, despues del esperado verano, de los ajetreos, del ir y venir, del sol, de las vacaciones.... a mi me encanta volver a comenzar un periodo de vida ordenada, y de que todo vuelva a su sitio.
JM
PD: Además, si no tuviesemos estos periodos... no estaríamos luego todos deseado que llegasen las vacaciones ¿no creeis?
3 comentarios:
Vuelve la rutina... a ver si podemos esquivarla unas semanitas más, porque a mí me resulta un poco asquerosa, la verdad.
Yo espero que esta rutina me ahogue, para encontrar algo de paz, que me siento muy revuelto ultimamente...
Por eso es conveniente alejarse de la ciudad en estos días... Para evitar la pereza de recomenzar la vida después de las fiestas ;-)
Publicar un comentario