jueves, octubre 13, 2005

Bora Bora


El otro día hablábamos de paraísos, y yo os dije que había encontrado dos; el primero estaba en Escocia y ya os lo conté y el segundo está en la Polinesia, y os lo contaré hoy.

Desde la península Ibérica tienes un agotador vuelo de casi 24 horas, porque la Polinesia está en nuestras antípodas, justo al otro lado de la Tierra, ya no pueden estar más lejos. La enorme distancia encarece mucho el viaje, por el coste del billete de avión, y echa para atrás a muchos viajeros, que se resisten a tal palizón de horas de avión.

El vuelo es por encima del atlántico, sobrevolando los USA, y haciendo escala en Los Ángeles. Desde Los Ángeles, queda un vuelo de 10 horas sin escalas sobrevolando el Pacífico…. y finalmente cuando el avión comienza a descender, se ve una diminuta isla rocosa en mitad de un inmenso océano azul turquesa, es Papetee, la capital.

Cuando se abre la puerta del avión, la primera bofetada de aire caliente y húmedo te da la bienvenida al trópico, y abandonas el “civilizado” aire acondicionado del avión. Tus primeras sensaciones son esos olores tan característicos, como a flores y especias, que impregnan todo.

La segunda buena impresión te la dan cuando te diriges al control de pasaportes, y ves el cartel de “Europeos”, que pasan con solo enseñar su DNI, mientras los yankees están haciendo cola con sus pasaportes azules…(bastante mal nos lo hacen pasar a los demás cuando entramos en USA). La Polinesia Francesa está definida como “territorio francés de ultramar” que es la manera moderna de decir “colonia francesa”, y como pertenece a la Unión Europea Francia, todos los europeos entran allí libremente, igual que los polinesios en Francia.

La tercera buena impresión es que en cuanto te diriges a buscar tu transporte hacia el hotel, los nativos te reciben siempre sonrientes, con los tradicionales collares de flores polinesios, con los que te dan la bienvenida, y que te hacen sentirte como muy bien recibido.

Los hoteles son de súper lujo, y te tratan a cuerpo de Rey; realmente es un país que vive del turismo, y lo cuidan muchísimo, ya que todo está pensado para que el visitante se encuentre cómodo. No existe la delincuencia, y el clima es siempre benigno, y cada día hay algún rato de lluvia fina, que hace que todo esté siempre verde. La vegetación es exuberante, las palmeras y árboles tropicales crecen en cada palmo de terreno que encuentran.

Pero lo más increíble de la Polinesia es sus aguas azul turquesa. Mares limpios, llenos de vida marina, con arrecifes de coral, tortugas, tiburones, peces espada, atunes... el paraíso de un buceador, pero que puede ser disfrutado con unas simples gafas y tubo, ya que los fondos son tan ricos en vida y las aguas tan transparentes que no hace falta descender al fondo para ver una enorme variedad de peces.

Dentro de las distintas islas, para mi la más bonita, y la que recuerdo como maravilla natural, es Bora Bora. Se trata de un atolón coralino, que es una formación geológica muy característica. Una isla central volcánica, con escarpadas paredes de roca volcánica, una estrecha carreterita que le da la vuelta a la islita… y un anillo de tierra que se ha asentado sobre los corales, que rodea la isla central formando una laguna interior increíble. Los hoteles e incluso el aeródromo están construidos en el anillo exterior, y desde los hoteles te vienen a buscar al aeródromo en lanchas fueraborda. Quizás el lugar más bonito que yo nunca he visto, y al que juré que alguna vez volvería.

La comida es fantástica ya que es una mezcla de recetas de comida francesa con materias primas locales, muy basada en productos del mar y en los pescados y mariscos. Yo disfruté como un enano, y comí fantásticamente con platos deliciosos. El marisco son unas variedades que yo desconocía, pero estaban buenísimas.

Los únicos productos que ellos exportan son los cocos y las perlas negras de la Polinesia… que allí las venden en todas las joyerías de todos los precios tamaños y colores… es imposible viajara allá sin que tu mujer te líe para que le compres alguna perla… imposible. En los escaparates de las joyerías hay miles de perlas, negras, verdes, azuladas… pero no puedes pedir un brillante o un rubí… en las joyerías solo venden perlas de la polinesia, que son el producto nacional.

Este es un destino para poder perderse alguna vez en la vida. Un sitio donde sientes como debe ser vivir como un marajá, y donde te das cuenta lo lejos que está tu vida tu trabajo y el resto de la civilización. Uno de esos sitios donde la vida transcurre despacio… donde te olvidas de ese ritmo frenético en el que nos hallamos inmersos, y solo escuchas el suave sonido de las olas al romper en las playas de arena coralina.

Eso es el paraíso terrenal, yo estuve una vez, y lo descubrí.

JM

6 comentarios:

Raist dijo...

Qué cabrón. Qué envidia... y no muy sana.

elmasmalo dijo...

La próxima vez que vayas o me llevas o te callas...

TarracoChil dijo...

Hola!
Yo tambien estuve 15 dias en la Polinesia (crucero + estancia). La verdad que el paraiso existe y ese es la Polinesia.
La verdad es que despues del palizón del viaje y de lo que te putean para entrar en USA, llegar a Papetee y ver el hotel, ver el agua cristalina y turquesa y respirar esa paz y tranquilidad te dices que ha valido la pena.

Yo estuve en Papetee, Bora Bora, Morea, Huahine, Raiatea i Tahaa.
Si me pierdo, seguro que me encontrais en Bora Bora.
Vaya pasada!!!! Hay de todo y todo bueno. Las immersiones ni os cuento, la variedad de colores impresionante y para rematarlo el cielo estrellado desde el embarcadero del Bloody Mery!

La verdad es que espero poder repetir la experiencia.

Si quereis saber más ya sabeis donde encontrarme...

Anónimo dijo...

Me encantaria ir de viaje de novios... el viaje es muy agotador verdad? eso es lo que me hecha hacia atras...

Anónimo dijo...

Siempre que alguien me pregunta, qué te falta por hacer??? Contesto: conocer Bora Bora y no me moriré sin hacerlo, se los juro!!! y ahora menos con está cátedra tan emocionante.
Esperanza (Colombia)

Anónimo dijo...

yo tb voi a ir dentro de unos años :)
lucia&kevin tequiiiero