domingo, febrero 05, 2006

Parabola


Hace un rato acabo de volver de misa, y el parroco del Perpetuo Socorro ha contado en el sermón esta parábola. Como me ha parecido MUY ILUSTRATIVA, la recojo aquí, por si a alguno le resulta tan provechosa como a mí.
Una noche anunciaron en las noticias que al día siguiente iba a haber unas fuertes lluvias, que provocarían inundaciones que obligarían al día siguiente a evacuar el pueblo. Al día siguiente como estaba anunciado llovió a mares, y el río comenzó a crecer.
Cuando todos los vecinos empezaron a abandonar sushogares una anciana mujer que estaba en su casa se negaba a evacuar su casa, y comenzó a rezar pidiendo su ayuda al señor. Un vecino se acercó a la casa y se ofreció a ayudarla para abandoar la casa, y ella se negó, diciendo que ella confiaba en la ayuda del Señor.
El río se desbordó, e inundó el pueblo. La anciana mujer subió al primer piso de su casa cuando la planta calle se inundó y continuó pidiendo su ayuda al Señor. Una zodiac de la Cruz Roja se acercó a la casa, y se ofreció a evuacuarla, y ella se negó diciendo que ella confiaba en la ayuda del Señor.
El río siguió subiendo y ella hubo de refugiarse en la azotea y continuó rezando a Dios. Un helicoptero de la Guardia Civil se acercó a rescatarla. Pero ella se negó a subir al helicoptero, diciendo que ella confiaba en la ayuda del Señor.
El río siguió subiendo y la anciana murió ahogada. Subió al cielo, y allí se encontró con Dios. Y ella le increpó diciendo que ella había rezado con mucha fe, y que Dios no la había ayudado en su necesidad, a lo que Dios le contestó:
" Por cuatro veces te envié ayuda; cuando a traves de las noticias te avisé de la crecida del río, cuando te envié a tu vecino, cuando envié a los voluntarios de la Cruz Roja, y finalmente cuando te envié al helicoptero a rescatarte, y las cuatro veces rechazaste mi ayuda. "
A mi me ha parecido una parábola muy ilustrativa, y por eso os la transcribo. Espero que os haya gustado y que os haya hecho reflexionar como a mi.
JM

2 comentarios:

Pow dijo...

La conocía. Ya me gustó la primera vez que la escuché. Estamos tan ciegos que en ocasiones somos incapaces de apreciar lo evidente.

(Es de Anthony de Mello, La oración de la rana)

Raist dijo...

Buenísima. Como casi todas de esta índole... a ver si consigo que no se me olvide...